viernes, 23 de octubre de 2009

NUESTRA NIÑA


Nos anunció su llegada con una postal. Era el mes de marzo y la postal decía: " Que sepáis que estoy en camino".
Fui en aquel momento la persona mas feliz del mundo. Era tan deseado... Quizás por serlo tanto se nos hizo larga la espera.
Desde el primer momento, aun sin saber el sexo del bebé, yo tenia grandes monólogos con esa personita y le contaba con que amor le esperábamos, sobre todo sus padres.
Ya cuando supimos que iba a ser una niña, aun le decía mas cosas. Tu abuela te contará un montón de cosas, te cantaré canciones de mi niñez, de donde soy, conocerás el pueblo donde nací y te contaré cosas de tu abuelo Roger, que se hubiera vuelto loco si supiera que iba a tener una nieta.
Le contaba que ella iba a ser afortunada, porque tendría la suerte de conocer dos culturas a las que ella amaría como yo lo hago. Porque para amar algo solo hay que comprenderlo.
Cuando mi hijo me puso la niña en brazos el día que nació, pensé en su abuelo y lo feliz que hubiese sido viendo la continuidad de nuestra unión y amor.
Me emocioné tanto... Ver de nuevo en mi casa el milagro de la Vida, que grande!
La niña se removió y movió sus bracitos, se quejó un poco y yo en mi corazón sentí que me decía "Sonríe abuela que ya estoy aquí"

A Guiomar Genové i Dalmau. Mi nieta.