viernes, 20 de abril de 2007

TBOS = comics

Todo lo que caía en mis manos era poco para leer cuando era pequeña.

Siempre andaba a la caza de los tebeos de mis hermanos, El Guerrero del Antifaz, El Hombre de Piedra, Roberto Alcázar y Pedrin, El Capitán Trueno, El Pequeño Sherif, Hazañas Bélicas , Superman... y muchos otros títulos que ahora no recuerdo de los tebeos de niños.

De los tebeos de niñas, recuerdo especialmente la colección Azucena y Florita. Azucena eran cuentos de hadas en los que siempre un príncipe se enamoraba de la chica pobre pero buenííííísima y decentííííísima y se les aparecían siempre las hadas buenas-super-guais que les facilitaban todo a las niñas buenas y obedientes que siempre hacían lo que decían los mayores y no cuestionaban ni uno solo de sus mandatos. Eramos niñas y ya intentaban comernos el tarro para que fuésemos dóciles en una sociedad supermachista. Las malas y contestonas siempre recibian algun castigo ejemplar por supuesto

Florita por el contrario era una jovencita dinámica alegre y que a las niñas españolas nos parecía el colmo de la modernidad, ya que llevaba pantalones vaqueros ajustados tipo pirata unas blusitas ceñidas monísimas y el pelo corto ( o sea sin trenzas ) con unos pañuelos a modo de diadema que vamos: el nova más. Porque encima salia sola y además tenía "amigos" y sus papás encantados.

Para una niña como yo, de pueblo y en los años 53 - 54 era impensable una vida como la de Florita y por eso leía sus historietas.

Después había los clásicos de historietas como T B O ( del que se cogió el genérico) Pulgarcito DDT. Pumby y tantos otros. Siempre me ha gustado leer y aún me gusta.

Tengo la satisfacción de poder decir que yo transmití ese amor a la la lectura a mis hijos. Que en esta casa siempre se ha leído y mucho. Que los Reyes Magos aparte de juguetes, siempre venían con una buena provisión de comics y libros infantiles. Que no había noche en que antes de dormir leyésemos todos un rato y en especial, se les leía a los niños.

Tengo el orgullo de pensar que su amor a la lectura, me lo deben a mi. A mis ganas de leer siempre. Toda la vida les he dicho que el mejor amigo del hombre no era el perro, sino un libro, porque te lo llevas donde quieras y cuando lo abres te hace compañía y te cuenta cosas y no te exige nada, a cambio eso si: te enseña puedes aprender mucho.

Ayer se inauguró El Salón Del Cómic de Barcelona y mi hijo mayor tiene un stand allí porque tiene una tienda de cómics.

Felicidades Carlos David.